domingo, febrero 24

La silla intocable

Esta es la crónica que yo hubiera escrito si estuviera hoy en La Habana. Pero no estoy. Por eso cuando la descubro en el hilo del servicio en español de la agencia francesa de prensa AFP, me llena de una alegría particular que alguien lo hubiera hecho. Es una alegría que se multiplica cuando descubro que las iniciales al pie del despacho son “CB”. O sea, Carlos Batista, mi colega cubano que en los últimos años se ha convertido en una pluma de obligatoria lectura. Lamentablemente, los editores de AFP – con esa cuchilla perversa y envidiosa que tienen todos los editores (reporteros frustrados) – no diseminaron el despacho con su firma. Pero no pudieron ocultar las iniciales. Celebro a CB, digo, a Carlos Batista. Un reportero en un difícil escenario trabajando bajo unas difíciles circunstancias. Y para los dogmáticos: dejen a Carlos tranquilo porque él no tiene culpa que yo escriba en El Nuevo Herald y me guste su trabajo.

LA HABANA, 24 Feb 2008 -- (AFP) -- De espaldar más alto que las demás del salón plenario, tapizada en cuero beige, la silla del histórico líder Fidel Castro permaneció respetuosamente vacía este domingo, cuando su hermano Raúl fue electo presidente: "Fidel es insustituible'', dijo en su discurso.

Vista desde el público, es la primera silla de otra mesa, a la derecha de la presidencia de la Asamblea Nacional (parlamento), seguida por la de Raúl y otros vicepresidentes del Consejo de Estado.

Así, vacía, permaneció, incluso con una botella de agua sin destinatario, el diario Granma y los documentos de la sesión, en la mesa, durante las tres reuniones entre julio de 2006 y diciembre de 2007 del Parlamento en el Palacio de las Convenciones, en el este de La Habana, a las que Fidel no asistió por estar convaleciente.

Víctima de una grave crisis intestinal que lo puso entre la vida y la muerte, según sus propias palabras, Castro, de 81 años, tuvo que delegar todos sus poderes en Raúl durante casi 19 meses, mediante una proclama que formalmente perdió su efecto este domingo.

En un mensaje, publicado el martes, Castro declinó su eventual elección como Presidente y Comandante en Jefe, lo que abrió una nueva etapa en Cuba.

Hace alrededor de ocho años, cuando el niño náufrago Elián González era retenido por sus familiares del exilio anticastrista en Estados Unidos, Fidel Castro visitó su escuela y declaró "intocable" la silla de Elián, quien regresó después de siete meses en ese país.

La "intocable" silla de Fidel se mantiene vacía en el Parlamento, cuando su ocupante por décadas sigue vivo, en plenas facultades mentales, y siguiendo la sesión parlamentaria por televisión, como lo hizo en las anteriores tres ocasiones en su retiro médico.

cb/mis/ja Cuba-Castro-Sucesión-política AFP.

3 comentarios:

  1. Todas las sillas de la presidencia son idénticamente iguales para que se aposenten los iguales entre sus iguales aunque siempre haya uno que es más igual que los demás. Coño, creo que estoy escribiendo con el espíritu de Cabrera Infante "montao".

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  2. el artículo es bueno. pero estoy de acuedo con el cucalambé, todas las sillas son iguales en la presidencia, ninguna tiene más altura o respaldar que otra. en la misma foto que ilustra se puede ver. he buscado otras fotos en cubaweb.cu de antes y ahora y son todas iguales.
    como metáfora del articulista está OK.
    lg rodriguez

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  3. Compadre no se puede negar que no eres cubano y que en el fondo admiras a ese cabron. Si supieras que ese tipo es un verdadero y diabolico incapaz, si hubieses sufrido la simple humillacion de no tener una cuchillita para afeitarte por la mañana, un jaboncito para bañarte en la tarde o un simple y sencillo cepillo de dientes...entonces otro gallo cantaria!...parecen boberias verdad?...eso hay que vivirlo compadre. De todos modos te agradezco que te dediques a escribir de Cuba, te leo desde hace años. Saludos, Cuco.

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