En tiempos de desgracia, lo mejor es mantener la cabeza fría y no dejarse llevar por los impulsos. Ya los detalles del accidente, donde perdió la vida Oswaldo Payá Sardiñas, están aflorando. El coche era conducido por el español activista del Partido Popular, Angel Carromero. A su lado iba Payá, detrás de él se encontraba el otro fallecido, el también cubano Harold Cepero y a su lado (detrás del español), el activista sueco, Jens Aron Modig. Todo indica, según fuentes españolas, que Carromero perdió el control del coche tras una curva cerrada y embistió un árbol por el lado derecho del coche, matando a Payá y Cepero, los únicos dos ocupantes del vehículo que no llevaban el cinturón de seguridad puesto.
El Gobierno español está intentando sacar a Carromero de Cuba lo más pronto posible, incluso esta noche, para que pueda dar un testimonio tranquilo de lo sucedido. Lo que si se sabe es que ambos, el español y el sueco, ingresaron al país como turistas y contactaron al opositor ahora fallecido.
El dolor familiar ante una tragédia es entendible, respetable y solo amerita toda la solidaridad. Pero no debe dar paso a declaraciones que solo siembran más confusión y sirven a aquellos que, en el pasado, no manifestaron ningún respeto por Payá Sardiñas, cuando se empinó por encima de la oposición cubana con el 'Proyecto Varela'. Decir que "los están matando", para referirse al Gobierno cubano y la oposición es una aseveración, en lo mínimo, de un desconocimiento supino de la realidad cubana. Alarmista e irresponsable. Esos tiempos no solo son pasado, como es una idiotez creer que siguen vigentes. Además, ¿un atentado con dos extranjeros en el coche? Ni que el Gobierno cubano fuera una partida de idiotas.
Es interesante escuchar ayer y hoy las mismas voces que hasta hace unas semanas criticaban abiertamente a Payá, alanbandolo ahora. Así, me dicen, no puede haber respeto. Payá fue un hombre importante en la disidencia y en la realidad histórica cubana. El exilio es sólo eso mismo: exilio. Pero no debe ser pretexto para denigrar. Aunque se entiende que es lo único que queda.
División en el exilio tras la muerte de Payá. (Artículo en ELMUNDO.es)
No solo es interesante oir las alabanzas de los anes criticos acerrimos como Ninoska y comparsa, sino que resulta extremadamente asqueante y refleja solo el oportunismo y el personalismo que lastran al exilio por decadas.
ResponderEliminarQuerido Rui, según la foto que he visto, el golpe que tiene el carro es en la izquierda. Yo sí creo que lo han matado, probablemente de camino al hospital o allí mismo, como hicieron con Laura.
ResponderEliminarBesos.
Así es, mi querida. Las fotos contradicen mi versión inicial, tal como nos diJeron algunos en Exteriores. De todos modos no lo borro, no seria ético. Y en un rato, cuando termine los quehaceres del día, culto las fotos. El Mundo es la prioridad. Besitos.
ResponderEliminarEn mi opinion esto fue un libretazo de algun esbirro de baja estofa que se le fue la mano.
ResponderEliminaraquí todo lo que sea "poner un muerto" se le saca lazca. daba asco la misa en la ermita, aquello era un bonche político. el bizco gutierrez leyendo la biblia, solo faltaba posada carriles llevando los sacramentos al altar.
ResponderEliminarEL HERMANO DE JUANITA
el miami cubano es la capital del despretigio. ver ahora a seso hueco pérez roura, a la redonda ninoska, a toda esa morralla de segunda alabando al difunto payá da más que asco verguenza.
ResponderEliminarla familia de payá en miami debe de tener las grabaciones de los improperios que por esa emisora le decian al fallecido. lo más noble era tonto útil: comunista, agente infiltrado, fañoso (ninoska hacia burlas de como hablaba payá).
nada que a cualquier muerto le sacan lazca, así sea la madre que los parió a ellos. y esperemos el rosario de artículos en el nuevo herald con la segura información de montaner que tuvo contacto directo con el oficial de tránsito de bayamo que le dijo desde el modelo hasta la chapa y el nombre del chofer del camión.
DI LA VERDAD